La velocidad de cálculo depende de varios factores.
Por un lado la concepción de la interfaz plugin del programa de edición de vídeo, que permite a Mercalli un cálculo vertiginoso – o que por el contrario lo limita. De este modo puede calcularse/analizarse un clip DV (720×576) en un Pentium4 (Duocore) con 120 imágenes por segundo, en Canopus Edius. Otros programas de edición alcanzan valores de un máx. de 35 imágenes por segundo – solicitando al procesador mínimamente. Éste es un indicio evidente de que la interfaz no está optimizada al máximo.
Pero también las dimensiones de la señal de vídeo son decisivas en la valoración de la velocidad de cálculo. Por ejemplo, una señal SD/DV con una resolución de 720×576 es aprox. 5 veces más veloz que una señal HDTV equiparable en 1920×1080 pixeles. Esto radica en la naturaleza del mismo asunto, ya que HDTV simplemente contiene 5 veces más información que ha de tenerse en cuenta. Otro factor puede ser la utilización del codec, que por naturaleza representa un “cuello de botella” para los flujos de datos y el consiguiente cálculo.
Por último y para completar hay que decir que también la CPU utilizada y la memoria de trabajo disponible (cuanto más mejor) influyen en el cálculo, al igual que el sistema de bus de datos, que no ha de estar dimensionado como el resto del hardware. Pero esto afecta a todos los programas de renderización intensiva donde se han de desplazar adicionalmente grandes cantidades de datos a la memoria – y de este modo en realidad también a la edición de vídeo en sí.